Le apodan “el Hachiko griego”; un perro que continúa con la firme decisión de esperar a su dueño al margen de la carretera.
Por: Ecoosfera
No cabe duda de que de los perros obtenemos incontables lecciones de lealtad, dulzura y por supuesto, sabiduría. Estos animales y mascotas no sólo han sabido adaptarse a los temperamentos humanos, sino que su amor y compañía carecen de limitantes. Básicamente, no necesitan entenderte totalmente, ni les importa si hoy los quieres o no los quieres, ellos siempre responderán ante ti de la misma manera cariñosa.
Y con tantos perros ejemplares que existen en este mundo, no pueden faltar los que nos rompen el corazón con sus heroicas muestras de tenacidad. La historia de este perrito en Grecia que, después de año y medio sigue esperando a su dueño en el lugar donde éste tuvo un accidente y falleció, es prueba de ello.
De acuerdo al canal Nafpaktia News, el dueño de este perro fue un hombre de 40 años llamado Haris, quien murió en noviembre de 2017, luego de haberse impactado con una mezcladora de cemento en la carretera. Los habitantes de la localidad aún no saben cómo es que lo hizo, pero el canino caminó unas 7 millas desde su casa, en Nafpaktos, hasta hallar el lugar del accidente. Desde entonces va y viene, pero siempre regresa ahí y espera.
Algunas personas han querido sacarlo de esa orilla de la carretera para darle una nueva vida, pero el perro regresa al mismo lugar. Ante a su feroz lealtad, un grupo de locales decidió construirle un pequeño refugio en este lugar. Además, le traen agua y comida para mejorar su estancia.
El perrito, que hoy es conocido como “el Hachiko griego” o “el Hachiko de Nafpaktos”(en referencia al famoso Hachiko, un perro japonés de raza akita, recordado por esperar a su amo en la estación de Shibuya varios años después de la muerte de éste), continúa esperando a su dueño, demostrándonos que el poder de la determinación, el amor y la lealtad sobrepasa cualquier cosa.
Muchos de nosotros ni siquiera hemos sido capaces de tomar decisiones firmes para hacer cambios radicales en nuestras vidas, y perritos anónimos como éste nos dan el ejemplo en cuanto a que valorar lo esencial de la vida realmente vale la pena. Quizá esa sea la gran labor de nuestros amigos peludos en este mundo.
Fuente: www.ecoosfera.com