Hay 3 razones por las cuales el plástico se puede considerar como el peor invento de la historia.
Por: Eco Maxei
El plástico se ha caracterizado por ser un material resistente a determinadas temperaturas y presiones, que nos ha servido para almacenar alimentos con el fin de preservarlos y protegerlos de agentes externos que los puedan deteriorar. Pero hay tres razones por las cuales el plástico se puede considerar como el peor invento de la historia:
1. Este polímero necesita de materias primas como petróleo y carbón para ser fabricado. Estos compuestos orgánicos, aparte de ser compuestos naturales, son combinados que aportan una gran cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero cuando son quemados para la fabricación de plástico; por este motivo es importante reutilizar los utensilios que usamos a diario, para disminuir de esta manera nuestra huella ecológica.
2. Los plásticos suelen transferir partículas o trazas de polímeros a los alimentos que son almacenados en botellas; por ejemplo, cuando bebemos refrescos o sodas almacenadas, estas bebidas suelen tener residuos diminutos de plástico que terminamos consumiendo. Es así como los famosos jugos naturales, yogures, leche e incluso el agua que compramos en el supermercado, tienen dichas trazas que se van desprendiendo con el paso del tiempo.
3. No estamos reutilizando las bolsas o botellas que son fabricadas diariamente, sino que cada día aumenta la demanda de estos utensilios por la facilidad que nos trae para preservar alimentos o transportarlos de un lugar a otro sin hacer desastres.
Sin embargo, el plástico ha renovado el mundo con su practicidad para fabricar cualquier tipo de cosas que usamos hoy en día. Éstas no existirían si no fuera posible, por ejemplo, fabricar elementos aislantes para recubrir los cables eléctricos o los marcos de lentes, entre otros.
Por lo anterior, podemos concluir que el plástico pudo ser el mejor invento jamás creado a lo largo de la historia de la humanidad, pero debemos pensar a fondo el impacto que estamos generando por la excesiva fabricación del mismo para satisfacer nuestra demanda caprichosa; en vez de reutilizarlo y hasta reciclarlo, hemos creado un mundo artificial de sólo plástico con la cantidad de botellas y bolsas que arrojamos diariamente.
Fuente: www.ecoosfera.com