¿Qué significa esto?
¿Qué podemos hacer? Actuar ya.
Por: Ecoosfera
La ONU ya nos lo advirtió: tenemos hasta 2030 para evitar un aumento de las temperaturas que se vuelva irreversible. Y hace poco se registraron temperaturas récord en Australia, que a la sombra alcanzaban casi los 50º. Aún así, los gobiernos, las instituciones, y muchos de nosotros, seguimos actuando como si no pasara nada.
La prueba de ello está en que el próximo mes de mayo se registrará un récord en la emisión de gases CO2, que estarán en su máximo histórico. Esto según las estimaciones de la oficina meteorológica británica Met Office, como lo dio a conocer para La Jornada el académico Alfredo Sandoval Villalbazo, del Departamento de Física y Matemáticas de la Universidad Iberoamericana.
Esto quiere decir que las emisiones de CO2 siguen en aumento…
y seguirán aumentando
En otro informe desolador, la ONU advirtió que las emisiones mundiales de CO2 aumentaron en 2017, después de tres años de estancamiento. No se había registrado un aumento semejante desde hace 9 años. Por eso, los expertos instan a los gobiernos –y a nosotros– para que actuemos más rápido y con urgencia.
Según Sandoval Villalbazo, durante 2018 se han arrojado a la atmósfera 37 mil millones de toneladas de dióxido de carbono, lo que representa un escandaloso aumento de 2.7% con respecto al año anterior. Un aumento inadmisible en estos momentos de crisis, sobre todo si tomamos en cuenta que es necesario recortar por lo menos mil 500 millones de toneladas de este gas.
Pero todavía podemos hacer algo…
En palabras de Greta Thunberg, lo que debemos hacer es asustarnos: creer que realmente estamos inmersos en una crisis sin precedentes, creer que realmente nuestra casa está en llamas. Porque lo está. Y entonces debemos actuar.
Es verdad que mucho depende de que los gobiernos hagan algo, y de que los presionemos para ello. Por eso es importante ser activistas, en la medida de nuestras posibilidades: es nuestra responsabilidad informar y permanecer informados, ampliando la conciencia contemporánea.
Pero también debemos modificar radicalmente nuestros hábitos. Comer menos carne, usar menos el coche –o compartir los viajes–, ser consumidores responsables, son algunas de las micro-acciones que, en conjunto, pueden hacer una importante diferencia. La ONU también nos insta a ello, y por eso también ha realizado guías prácticas que pueden sernos de mucha ayuda.
Todavía no hemos fracasado como especie. Aún hay tiempo.
Fuente: www.ecoosfera.com